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Cuando decimos preparar el objeto nos referimos a indicar a la máquina cómo lo queremos imprimir. Lo que haremos es usar nuestro archivo 3D en .stl u .obj, añadirle los parámetros y cualidades que nosotros queramos que tenga nuestra pieza física y guardarlo en un formato .gcode para mandarlo a la máquina. Pero no te asustes, iremos poquito a poco. Para conocer un poco más el mundo de los parámetros vamos a usar el software Cura por ser un sorftware muy intuitivo y amigable pero tranquilamente podríamos usar otros softwares como Repetier-Host o Simplify para la misma función.
Comenzaremos por conocer el interfaz de Cura.
En Cura nos encontramos con dos partes importantes, la parte de los parámetros donde podemos indicar cómo queremos imprimir las piezas que es la parte blanca en el lado izquierdo del panel y la parte de la visualización de la pieza en 3D representada con una superficie cuadrícula azul al lado derecho del panel. En esta última parte podemos rediseñar la pieza con opciones sencillas como escalar una pieza, cambiar su posición o hacer una simetría. Estas operaciones las podemos realizar con los botones de la parte inferior.
La opción de escalado nos resultará muy útil sobre todo si nos hemos descargado una pieza desde Internet y el tamaño que tiene no es de nuestro agrado o si se nos ha olvidado escalar la pieza en el software de diseño.
En la parte superior en la zona de visualización de pieza tenemos unos accesos directos para abrir archivos y para guardarlos en formato .gcode (recordar que este será nuestro objetivo en este apartado).
El botón de guardar archivos .gcode del área de visualización de objeto a imprimir es un botón dinámico lo que significa que cambia según y como estemos usando el software. Podemos tener tres versiones diferentes:
No recomendamos la opción de imprimir directamente desde Cura por varias razones. La primera es que el archivo no se guarda en ninguna parte, lo que significa que si apagamos otro día si quisiéramos realizar la misma impresión tendríamos que volver a prepararlo todo porque no tendríamos un .gcode guardado en el ordenador. La segunda razón es que una vez mandamos imprimir con Cura no podemos modificar ninguna de las opciones previamente elegidas. Es mejor usar Cura para generar el .gcode e imprimir en Repetier-Host tal y como lo explicaremos en este tutorial.
También podemos visualizar los objetos a imprimir de formas diferentes:
El interface también nos informa del tiempo que va a durar la impresión y la cantidad de filamento que va a utilizar para ello, tanto en metros como en gramos. Estos datos que se nos ofrecen irán cambiando cada vez que modifiquemos algo en la pieza o cambiemos algún valor de los parámetros del lateral izquierdo.
Las impresoras de deposición tienen una limitación: No pueden imprimir en el aire. Cuando una pieza tiene zonas en el aire decimos que tiene voladizos. Si el voladizo tiene un ángulo menor a 40 grados es casi seguro que necesitará ayuda para ser imprimido para que no sufra errores de impresión. Es por eso que lo primero que tenemos que hacer es posicionar la pieza de manera óptima. Utilizaremos la opción de Rotate y moveremos la pieza a una posición en la que no tengamos voladizos. Podemos usar la visualización Overhang para que nos avise de posibles zonas en voladizo. En caso de que no puedas colocar la pieza en una posición sin voladizos no te preocupes. Más adelante te contaremos un truco para que esto no sea un problema.
Asegúrate también de escalar la pieza al tamaño adecuado. Para ello usar la opción scale en el cual podréis modificar el tamaño de la pieza porcentualmente o dándole un tamaño específico.
Por último, y no menos importante, es asegurarnos que las piezas son imprimibles. Tenemos que asegurarnos que las piezas que salen el el visualizador están en amarillo. Si el color de la pieza es gris significa que la pieza no va a ser imprimida ya sea porque la hemos posicionado fuera del área de impresión o porque el tamaño es tan grande que sobre sale del volumen imprimible.
Una vez tenemos la pieza correctamente colocada el siguiente paso es indicar al software que cualidades tiene que tener la pieza imprimida. Para ello tenemos la sección de parámetros. En esta sección le podemos indicar al software si queremos imprimir la pieza rápidamente o si queremos una calidad excepcional, si queremos hacerla hueca o indicarle al software cómo queremos hacer los voladizos. Son muchas las opciones que podemos controlar, no hay más que mirar la pestaña de Básicos o la de Avanzados.
Para hacerlo todo más fácil desde Tumaker facilitamos unos perfiles con los valores ya establecidos para cada material y calidades diferentes. Lo único que tenemos que hacer es cargar 'el 'perfil adecuado:
Hay ciertos parámetros que son particulares de cada impresora y diseño que queramos imprimir con lo que no podemos predefinir en los perfiles. A continuación explicamos que apartados tenemos que modificar y para qué es cada variable.
Tendremos que tener en cuenta que si el hueco es muy pequeño el software no creará soporte ya que será probablemente más difícil quitar el soporte que hacer el voladizo sin ayuda.
Perfecto, solo nos queda guardar nuestra configuración. Para ello tenemos dos opciones, la primera es clickar en el botón de disquete o tarjeta sd. Si tenemos TumakerOS y nos aparece por defecto la opción de impresora pero queremos guardar el archivo .gcode tenemos que hacerlo de la segunda manera.Entramos en File y clickamos en SaveGCode.
Aunque los perfiles ya traen los valores más importantes delimitados podemos modificarlos para adaptarlos a nuestro gusto o indicarle al software particularidades a tener en cuenta.
Como os daréis cuenta en cuanto comencéis a imprimir muchas de las variables están relacionadas entre sí.
http://wiki.ikaslab.org/index.php/Impresi%C3%B3n_3D_paso_a_paso
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